Resumen completo del libro «Piense y hágase rico» de Napoleon Hill

“Piense y hágase rico” es uno de los libros más vendidos de todos los tiempos. Realiza un análisis del poder psicológico del pensamiento y del cerebro para poder progresar en tu carrera profesional hasta conseguir la satisfacción económica y personal.

Así que si te interesa “Piense y hágase rico”, el resumen que tienes a continuación incluye los aspectos más importantes.

“Piense y hágase rico”: resumen

Este libro se basa en el estado mental. Aprovecha el poder del pensamiento para materializar deseos intensos y propósitos definidos.

Ahora bien, hacer realidad lo que tanto te obsesiona (el propósito definido) no es una tarea fácil. Sin embargo, si lo deseas con ganas y estás dispuesto a poner toda la carne en el asador, acabarás teniendo éxito.

El autor expresa esta idea mediante la siguiente fórmula:

Deseo + Ideas + Planes + Acción enorme = Éxito

Así que empieza por establecer tu objetivo. ¿Qué es lo que quieres de verdad? ¿Un mejor puesto de trabajo? ¿Tener éxito en tu carrera profesional? ¿Trabajar para un líder empresarial que te inspire?

Pues bien, si deseas conseguir ese objetivo resulta clave cambiar tu mentalidad para pasar del fracaso consciente al éxito consciente.

Para que esto ocurra, la pregunta “¿cómo consigo un trabajo?” debe cambiar a “¿qué puedo aportar en mi trabajo?”. Y la pregunta “¿cómo puedo ganar más euros por hora?” debe pasar a ser “¿cómo puedo dedicar más energía, ganas y concentración?”.

Para llegar desde tu situación actual hasta donde quieras estar, el autor destaca lo siguiente:

“Nunca abandones. Nunca te rindas. Céntrate. Busca ayuda. Haz nuevos contactos. Sigue distintos enfoques. Busca recursos adicionales que te ayuden a mejorar tu capacidad para buscar trabajo. Persevera y encuentra personas que puedan ayudarte a conseguir tus objetivos”.

Deseo: el origen de todos los logros

¿Qué es lo que deseas por encima de todo lo demás? Tras leer “Piense y hágase rico”, el resumen a este respecto es que un deseo intenso de conseguir un objetivo se basa en una combinación de dos tipos de motivaciones.

Por un lado están las motivaciones que tiran de ti hacia el objetivo cuando el resultado del mismo es muy favorable; y por otro lado están las motivaciones que te empujan a pasar a la acción debido a las consecuencias negativas de no hacerlo.

Dicho esto, el autor del libro describe la mentalidad que hay que tener en lo que respecta a distintas áreas clave del deseo:

Carrera profesional

Pasar de preguntarte “¿qué consigo?” a preguntarse “¿cómo puedo mejorar?” implica pasar de las preocupaciones motivadas por el ego (titulación, salario, beneficios, etc.) a las oportunidades que proporcionan la empresa y el puesto de trabajo.

Liderazgo

Para liderar primero tienes que seguir a un líder existente y aprender de él. ¿Cómo podría afectar a tu carrera el hecho de convertirte en aprendiz de alguien que admiras y que está en lo más alto de tu campo?

Dinero

El autor del libro sugiere una serie de pasos para lograr tus deseos relacionados con el dinero:

1. Sé específico con la cantidad de dinero o el tipo de trabajo que deseas.
2. Establece con exactitud qué pretendes dar a cambio del dinero que deseas.
3. Fija una fecha en la que tengas pensado conseguir el dinero que deseas.
4. Elabora un plan bien definido para llevar a cabo tu deseo y ponerte manos a la obra.
5. Escribe una declaración clara y concisa que incluya la cantidad de dinero que pretendes conseguir, el límite de tiempo, lo que quieres ofrecer a cambio y el plan que tienes pensado seguir para acumular dicha cantidad.
6. Lee tu declaración escrita en voz alta, dos veces al día.

Fracaso

Intenta aprender de los fracasos y analízalos sin el vínculo emocional asociado a las causas de dichos fracasos. Úsalos como oportunidad de mejora para conseguir logros más grandes. Y es que “todos los fracasos traen consigo la semilla de un éxito equiparable”.

Los deseos de otras personas

Si ayudas a tu jefe o al dueño de una empresa a conseguir sus objetivos (como empleado o como autónomo), también podrás avanzar en tus propios objetivos porque empezarás a destacar poco a poco en aspectos de interés de cara a conseguir dichos objetivos.

Fe: visualizar y creer que cumplirás tu deseo

“Tu éxito o tu fracaso se basa en buena medida en la confianza que tienes en ti mismo, y una mentalidad positiva es la base que permite conseguir el éxito”.

Pues bien, si lees “Piense y hágase rico”, el resumen que se puede extraer gira en torno a la idea de que la fe es el punto de partida hacia el éxito, y el pegamento que lo mantiene todo unido.

Como estado mental, es posible inducir o generar fe mediante afirmaciones o instrucciones reiteradas dirigidas a la mente subconsciente. Al favorecer las emociones positivas y eliminar las negativas (como la duda, el rechazo y el temor), la fe puede ser una herramienta útil de varias formas:

Para hacer acopio de fe en forma de confianza en uno mismo, el autor sugiere firmar una declaración que deberías repetir a diario para tratar de influir de manera subconsciente en tus pensamientos y tus acciones. Esta declaración debería incluir afirmaciones que reconozcan ciertos aspectos de ti mismo:

Así que busca ejemplos de personas que estén donde tú quieres estar (en cuanto a carrera profesional, dinero, influencia, lo que sea) y usa dichos ejemplos para mantener fuerte tu fe y para recordarte a ti mismo que es posible lograr lo que deseas.

Autosugestión: el medio para influir en la mente subconsciente

El principio de autosugestión comunica nuestros deseos directamente con la mente subconsciente sobre la base de una fe inquebrantable.

Al repetirnos a nosotros mismos nuestros deseos y pensamientos conscientes (tal y como se indica en el ritual descrito en la sección dedicada a la fe) podemos recuperar el control total sobre lo que llega a nuestra mente subconsciente, ejerciendo un control sobre nuestras decisiones, sentimientos y acciones.

Conocimiento especializado: observaciones y experiencias personales

Para ello puedes recurrir a cursos, seminarios, libros (¡o resúmenes!), conferencias, etc. Todo esto te permitirá mejorar tus probabilidades de adquirir el conocimiento especializado que tanto necesitas.

En el otro extremo del espectro se encuentra la posibilidad de trabajar con personas expertas (“alquilar el conocimiento”). Obviamente, una persona ambiciosa debe aprender durante toda su vida para estar al día de las últimas novedades en su campo.

Imaginación: la fábrica de la mente

Y por otro lado está la imaginación creativa, que es de donde surgen tanto las ideas (“inteligencia infinita”) como la inspiración.

Para exprimir al máximo tu imaginación de cara a conseguir tu gran objetivo debes elaborar una lista de ideas que te inspiren y que te permitan sacar el máximo provecho a tus talentos.

Planificación organizada: la cristalización del deseo de una acción

Si quieres conseguir tu objetivo, no debes quedarte esperando a tener éxito. Cada logro empieza con un deseo fuerte, transformado en realidad a través de la imaginación, y seguido de un plan organizado.

Ahora bien, ningún plan es perfecto. Cuando ejecutes tu plan, es probable que experimentes derrotas temporales.

En este sentido, la mejor forma de enfocar estas derrotas consiste en aceptarlas como señal de que tus planes no son los mejores. Así que reformula los planes y sigue persiguiendo tu objetivo armado con el conocimiento de tus fracasos anteriores.

En cualquier caso, si lees “Piense y hágase rico”, el resumen sobre esta cuestión es que no debes rendirte antes de alcanzar tu objetivo, porque quienes abandonan no podrán ver los frutos de sus planes a largo plazo.

Decisión: el control de la postergación

“Dile al mundo lo que pretender hacer, pero primero muéstralo”.

En general, las personas que fracasan tienden a tomar decisiones con mucha lentitud, y además cambian de opinión con demasiada frecuencia y rapidez.

Las personas exitosas toman decisiones de forma rápida y firme, cambiando poco a poco de forma de pensar. Saben lo que quieren, y normalmente lo consiguen.

Ahora bien, esta claridad en las decisiones siempre requiere de valentía. La postergación o procrastinación es lo contrario a la decisión, y es un enemigo muy habitual que casi todas las personas deben derrotar.

Perseverancia: el esfuerzo continuado y necesario para atraer la fe

La falta de perseverancia es una de las principales causas del fracaso. Se puede superar, pero dependerá por completo de la intensidad de tus deseos: los deseos débiles llevan a resultados débiles.

La base de la perseverancia es la fuerza de voluntad, aunque también está influida por otros factores, como los siguientes:

¿Cuáles de los factores que acabo de mencionar te faltan y podrían estar perjudicando a tu perseverancia? Por contrario, la falta de perseverancia se manifiesta a través de los siguientes síntomas:

Ahora bien, ¿Cómo se puede desarrollar la perseverancia? Pues el autor sugiere los siguientes pasos:

1. Establece un propósito bien definido, respaldado por un intenso deseo de satisfacerlo.
2. Elabora un plan definido expresado mediante una acción continua.
3. Mantente alejado de todas las influencias negativas y desalentadoras.
4. Rinde cuentas ante otras personas que te animen a seguir tu plan para lograr tu propósito.

El poder de la Mente Maestra: la fuerza impulsora

Una mente maestra tiene un equipo de personas cuyo trabajo es ayudarla a tener éxito y a llevar a cabo sus planes.

Pues bien, ¿Quién podría formar parte de tu equipo y cómo podrías formar uno en los próximos treinta días? Nadie puede alcanzar un gran éxito sin el poder de una mente maestra.

Según el autor del libro, “dos mentes nunca podrán unirse sin crear una tercera fuerza invisible e intangible que se podría comparar con una tercera mente”.

De esta manera, el objetivo de una mente maestra consiste en convertir el conocimiento en poder organizándolo en planes bien definidos y luego trasladando esos planes a la acción.

La canalización de la energía sexual: convertir el sexo en creatividad

El sexo tiene tres aspectos potencialmente constructivos:

Pues bien, tras leer “Piense y hágase rico”, el resumen sobre este tema es que el deseo sexual es el más poderoso de los deseos humanos. Su impulso aporta perspicacia a la imaginación, así como valentía, fuerza de voluntad, perseverancia y creatividad, todo ello a unos niveles por encima de lo habitual.

El impulso sexual (los pensamientos de expresión física) se puede transmutar en creatividad y productividad que se pueden utilizar como una poderosa fuerza para alcanzar el éxito o para acumular riqueza. Requiere ejercitar la fuerza de voluntad, pero el esfuerzo merece la pena por la recompensa.

La mente subconsciente: el vínculo conector

La mente subconsciente es el vínculo conector entre la mente finita y la inteligencia infinita de los seres humanos.

Se puede usar como medio para convertir tus deseos en su equivalente físico o monetario. Sin embargo, si no consigues plantar tus propios deseos en ella por culpa de tu irresponsabilidad, se alimentará de cualquier otro pensamiento que le llegue.

Para conseguir el control de tu mente subconsciente debes adquirir el hábito de aprovechar las siguientes siete emociones positivas: deseo, fe, amor, sexo, entusiasmo, romance y esperanza.

La mera presencia de una única emoción negativa en tu mente consciente podría llegar a destruir cualquier oportunidad de conseguir una ayuda constructiva por parte de tu mente subconsciente.

Las siete principales emociones negativas que debes evitar son: temor, envidia, odio, venganza, avaricia, superstición e ira.

En última instancia, las emociones positivas acabarán por dominar por completo tu mente, de forma que las negativas no puedan entrar en ella.

El cerebro: una emisora del pensamiento

Cada cerebro humano es al mismo tiempo una estación emisora y receptora de las vibraciones del pensamiento.

La mente subconsciente es la “estación emisora” del cerebro, a través de la cual se transmiten las vibraciones. Por otro lado, la imaginación creativa es la “antena receptora” a través de la que se captan las vibraciones desde el éter.

Cuando se estimula hasta alcanzar una frecuencia de vibración elevada, la mente se vuelve más receptiva a las vibraciones del pensamiento.

Esta aceleración tiene lugar a través de las emociones positivas y las negativas. Pues bien, las vibraciones que tienen una frecuencia extremadamente alta son las únicas que se transmiten por el éter de un cerebro a otro.

El sexto sentido: el acceso al templo de la sabiduría

La comprensión del sexto sentido sólo se puede conseguir a través de la meditación, mediante el desarrollo de la mente desde su interior.

Cuando hayas conseguido dominar el sexto sentido, serás capaz de recibir alertas sobre los peligros acechantes a tiempo para evitarlos. También podrás darte cuenta de las oportunidades con suficiente tiempo como para aprovecharlas.

Sin embargo, también hay un séptimo “enemigo”: la susceptibilidad a las influencias negativas. Así que si quieres protegerte de este enemigo (como hacen todas las personas que acumulan una gran riqueza), tendrás que:

El miedo sólo es un estado mental. Por lo tanto, se puede controlar y dirigir. Así que usa esta idea a tu favor: “los impulsos de pensamiento de los seres humanos se convierten de inmediato en su equivalente físico, sin importar si esos pensamientos son voluntarios o involuntarios”.